Para los nostálgicos de los años 80, retrocedemos en el tiempo para recordar una serie de gran éxito que se estrenó en el canal de la NBC en 1985. Nada más y nada menos que las Chicas de Oro, una serie que narraba las aventuras y desventuras de cuatro mujeres hechas y derechas con alguna cana de más.
Esta comedia consta de siete temporadas y se emitió desde 1985 hasta 1992. Cuatro mujeres de entre 50-80 años vivían en un mismo chalet en Miami, Florida. Cada una de ellas, con sus historias del pasado y del presente, nos hacían tener una visión muy distinta al tradicional concepto que tenemos sobre la 3a edad.
¡Vamos a presentaros a estas cuatro maravillosas y divertidas mujeres!
Blanche Devereaux (Rue McClanahan)
Dueña de la casa donde pasa toda la acción. Es una mujer viuda y de origen sureño de unos 50 años. Un poco vanidosa, quiere aparentar ser más joven. Blanche es la que da más picardía a la serie por sus distintos encuentros amorosos que tiene con varios hombres.
Con su difunto marido tenían seis hijos. Aunque ella sentía devoción por su él, descubrió que le fue infiel durante el matrimonio cuando apareció un hijo ilegítimo.
Dorothy Zbornak (Beatrice Arthur)
La única divorciada de las cuatro e hija de Sophia Petrillo. Es la responsable y seria del grupo y trabaja como profesora suplente de literatura americana. Se va a vivir con Blanche porque encuentra un anuncio, en un supermercado local, para compartir casa.
Se casó muy joven porque su pareja la dejó embarazada en su graduación. Desde entonces, durante sus 38 años de matrimonio le fue infiel en muchas ocasiones, hasta que la dejó por una joven azafata. Aunque la pareja está divorciada, el ex marido de Dorothy, Stan, suele recurrir a ella en varias ocasiones, especialmente, cuando está mal.
Rose Nylund (Betty White)
Es la ingenua campesina que proviene de St. Olaf. También viuda, es la más bonachona y afable de todas. Siempre se pierde en sus historias del pasado, cuando vivía en Minnesota.
Con su difunto marido tuvieron cinco hijos. Después de la muerte de éste y pasar un tiempo en St. Olaf, decidió mudarse a Miami donde en un supermercado encontró, como Dorothy, el anuncio de Blanche para ir a vivir con ella. Primero trabajó en un centro de asistencia contra el dolor, y luego fue asistente de un reportero en un canal local.
Sophia Petrillo (Estelle Getty)
La mayor de las cuatro y la madre de Dorothy. Es una mujer que no tiene pelos en la lengua y suelta todo lo que piensa. De origen siciliano, se mudó a Nueva York y se casó con Salvatore Petrillo con el que tuvo tres hijos.
En el primer episodio de la serie, Sophia se va a vivir con las tres chicas porque estaba ingresada en una residencia de la tercera edad llamada “Prados Soleados”, pero sufre un incendio y se quema. Al principio, intenta huir a Sicilia por ser la principal sospechosa de quemarla. En el transcurso de la serie, Sophia describe las residencias con cierto desprecio, por su poca calidad y el maltrato que se les da a los residentes.
Se convirtió en un programa fuera de lo común, ya que en él se trataron muchas temáticas, algunas más susceptibles que otras para la época en la que debutó la serie. Estos temas eran bastante controvertidos, teniendo en cuenta que las protagonistas no eran precisamente jóvenes de instituto.
Algunos de ellos eran: la homosexualidad y el matrimonio homosexual, la discriminación por edad, sexo seguro, la enfermedad del Alzheimer, violencia de cualquier tipo (a mano armada, doméstica, etc.), racismo, soledad, derechos de los animales, demencia, inmigración, corrupción política, y muchos más.
Es una serie que, aunque la estética ya parece bastante desfasada, nunca pasará de moda.