- El dispositivo de la primera app de Andorra y del Estado Español para el cuidado de la familia a distancia, se puede comprar desde este mes de septiembre en las principales farmacias del territorio, ante la alta demanda desde su lanzamiento en agosto.
- Entre sus principales funcionalidades, cabe destacar el botón de ayuda, conectado a una central receptora de alarmas, y un sistema de detección de caídas, que se activa de forma automática en los Servicios de Emergencia de la zona correspondiente.
- Cien familias de Andorra han participado en la prueba piloto de prelanzamiento del reloj, por el que se han interesado cerca de 16.000 usuarios.
Barcelona, 22 de septiembre de 2021. Poco más después de un mes de salir al mercado, Durcal, la primera app andorrana y española para el cuidado de la familia a distancia, pone a la venta en las farmacias de Andorra su reloj GPS en tiempo real integrado. La acción, pionera en el territorio, viene a reforzar el objetivo principal de Durcal con su dispositivo como poner la teleasistencia al alcance de todas las familias.
Desde este mes de septiembre, el reloj Durcal GPS está en algunas de las principales farmacias de Andorra, como son Farmacia del Fener, Farmacia Rocamora, Farmacia Internacional y Farmacia Pirineos.
Una de las principales características del reloj de Durcal es su diseño funcional y minimalista, más cercano a los smartwatch que a los actuales dispositivos de cuidado en remoto, que suelen ser estigmatizantes y segregadores al tener una apariencia muy médica. Pensado y diseñado por los mayores y niños, entre las principales funcionalidades del dispositivo cabe destacar el botón de ayuda y el sistema de detección de caídas, en ambos casos conectados a una central receptora de alarmas. Desde esta central es de dónde se llamará al usuario que ha tomado el botón de ayuda, para identificar la emergencia y actuar con rapidez, en una acción coordinada con los Servicios de Emergencia de Andorra y de los diferentes territorios del Estado Español.
También se envía la ubicación del reloj a los familiares, para que conozcan dónde se encuentra la persona que ha pedido ayuda. Además, el reloj Durcal no necesita que el usuario lleve el móvil encima (sólo el cuidador o familiar), lo que facilita su uso entre el target objetivo del dispositivo.
El reloj, con una lista de espera de 16.000 personas desde que se anunció su lanzamiento el pasado mes de junio, además de las funcionalidades anteriormente citadas, también muestra información útil de las principales constantes vitales, como el pulso o el nivel de oxígeno en sangre (dato bastante importante a la hora de detectar un posible contagio de Covid-19). Incluso, avisa al familiar/cuidador sobre la entrada y salida de casa o de otros espacios configurados en la app, así como el nivel de batería del reloj.
Un reloj para todas las personas
Según explica el andorrano Guillem Viladomat, CEO de Durcal, con este nuevo lanzamiento, la app quiere “democratizar la teleasistencia”. Un buen ejemplo es su bajo coste. Con un plan de pago mensual o anual desde los 19€/mes, el usuario y sus familiares pueden hacer uso de los beneficios de la nueva tecnología. El reloj se entrega sin coste añadido a las 24h de haber efectuado la compra; y está preparado para utilizarse con sólo sacarlo de la caja. En caso de que el reloj Durcal sea adquirido en la farmacia, es la propia farmacia quien da de alta el nuevo dispositivo en la web de la app.
“Queremos que todas las familias que necesiten cuidar a una persona puedan hacerlo con Durcal“, comenta Viladomat. No queremos que ninguna persona se quede atrás por no poder acceder económicamente a este tipo de dispositivos, habitualmente con un coste elevado”, comenta el CEO de la app, quien desarrolló Durcal para poder cuidar mejor de su abuela. “Tampoco queramos que se señale a nadie para llevar un reloj de teleasistencia”, argumenta Viladomat respecto al diseño funcional del dispositivo.
Prueba piloto con 100 familias
Antes de salir al mercado el pasado mes de agosto, 100 familias de Andorra (lugar de origen de la familia Viladomat) formaron parte de la prueba piloto que Durcal llevó a cabo para testear cada una de las funcionalidades del reloj. Entre las familias, escogidas con perfiles diversos para tener una representación de todo el espectro del público objetivo del dispositivo, destacaron la seguridad como principal valor que aporta el reloj.
“Nos gusta la sensación de tranquilidad que tenemos cuando vamos con los niños al parque. Si se alejan, aunque sea segundos, de nuestro jefe visual, sabemos cómo y dónde están en cada momento”, explica una pareja de 40 años, padres de dos niños de 7 y 5 años, respectivamente. En el otro target, el de las personas mayores, los argumentos son similares cuando se pregunta a sus hijos. “Mi madre tiene una cuidadora interna con ella, pero un reloj como ésta me da calma y sosiego. Para mí, que no puedo visitar a mi madre todos los días, es muy importante saber que está bien en todo momento. Incluso antes de que me avise la cuidadora”, argumenta otro de los usuarios que ha podido testear el reloj. “Durcal sería como un ángel de la guarda”.
Los wearables como tendencia de seguridad
El lanzamiento de Durcal forma parte de la tendencia creciente del uso de dispositivos como elemento de seguridad por distintos colectivos sociales. En este sentido, según datos del último estudio realizado por Durcal, Función de geolocalización por madres y padres (mayo 2021), el 96% de los padres y madres se muestran a favor de nuevas herramientas tecnológicas que ayuden a geolocalizar a sus hijos.
Más allá del debate que supone la dicotomía privacidad-seguridad, la gran mayoría de los padres y madres encuestados prefieren saber la ubicación de sus hijos si ese conocimiento les proporciona mayor seguridad y tranquilidad, en detrimento de la propia intimidad de los suyos. En concreto, el 84% de los padres valoran las apps de geolocalización como una herramienta para el cuidado de los hijos. Con la llegada del reloj de teleasistencia con GPS de Durcal, podemos extrapolar este debate también al cuidado y ayuda de nuestros mayores.
