La menopausia suele ocurrir en mujeres de entre 48 y 55 años, aunque lo más común es sobre los 51. A veces se acompaña de síntomas incómodos y puede ser una fuente de estrés. ¿Cómo aceptar y vivir mejor la menopausia? En este artículo, te damos consejos para sentirte bien con tu cuerpo y con tu cabeza durante esta etapa de la vida.
Cada síntoma tiene su tratamiento
Sofocos, sequedad vaginal, trastornos del estado de ánimo, insomnio, irritabilidad, pérdida del libido o aumento de peso: los síntomas de la menopausia son numerosos. Se deben a ovarios en reposo que ya no producen estrógenos.
En este contexto de trastornos físicos, visitar tu ginecólogo es lo más recomendado para encontrar el tratamiento adecuado según tus síntomas. El médico prescribirá caso por caso para mejorar la calidad de vida de cada mujer y vivir mejor la menopausia. Si no se tratan bien, los síntomas pueden causar días de tensión.
La opción de tratamiento hormonal para vivir mejor la menopausia
Antes de recurrir a un remedio médico, puedes probar estos consejos para reducir los sofocos: usar ropa ligera, beber bebidas frescas, reducir el consumo de alcohol y usar un ventilador si es necesario.
Si estas simples acciones no son suficientes y no consigues vivir mejor la menopausia, a menudo se propone el tratamiento hormonal de la menopausia que compensa la secreción insuficiente de estrógenos en los ovarios. En forma de crema o parche propagando estrógenos naturales, actúa contra todos los síntomas al traer al cuerpo estrógenos naturales.
Alternativas a base de hierbas
Cuando una mujer no desea tomar un tratamiento hormonal, también existen tratamientos a base de hierbas que imitan la acción de las hormonas, como la soja, el lino o lúpulo. Puedes encontrarlas en infusiones que se pueden beber dos o tres veces al día.
La homeopatía también puede ser una solución para vivir mejor la menopausia. Ayudaría a combatir los sofocos y los efectos adversos de la menopausia.
Aceptación para vivir mejor la menopausia
Estos tratamientos a menudo proporcionan ayuda pero el bienestar psicológico es a veces más difícil de lograr. “Tuve una verdadera tristeza en ese momento, me di cuenta de que me estaba haciendo mayor y realmente no lo quería”, dice María de 58 años.
Cuidarse y moverse tiene aquí toda su importancia. Al hacer ejercicio, nos damos cuenta de que nuestro cuerpo es nuestro aliado, que está a nuestro servicio. De este modo, ganamos tono físico y mental para resistir mejor el estrés y la fatiga. El yoga o la sofrología pueden ser buenas opciones porque te permiten controlar tu respiración y volver a conectarte con tus emociones.
Darse nuevos objetivos
Debes mirar la menopausia como un pasaje, una transición y debes recordar que todavía hay muchas cosas que te esperan. Es el momento de empezar nuevas actividades, invitar más personas en casa, etc.
¿Estos consejos te han sido útiles? ¿Algo en particular te ayudó a vivir mejor esta temporada de tu vida?